Llevo muchos años queriendo hacer mis propias aceitunas, pero siempre he pensado que era difícil darle el punto exacto de sabor.
Un año he tenido que esperar para degustarlas y reconozco que en muchos momentos he pensado que sería fracaso absoluto.
Este domingo he decidido hacer una cata a ciegas y para ello he puesto un cuenco en la mesa de la cocina sin decir su procedencia y así ver realmente que opinaban de su sabor....
Primero ha sido mi marido....una cervecita y pica una aceituna "ummmm están ricas estas olivas, son del mercado?". Aahhhh, primer aprobado!!!!.
Segundo mi hijo Alvaro, pasa por el lado de la mesa y coge una..."Mami que rica están estas aceitunas!. "Bravo!!!, una segunda opinión positiva.
Y tercero...Carlota, se sienta conmigo a degustarlas y me pregunta....¿mamá estas son las aceitunas tuyas?. Me pilló!!!!. Si!!!!....... "son buenísimas!".
Éxito rotundo!!!
Las aceitunas son de Antonio el padre de mi amiga Clara. Me buscó en el campo todas las hierbecitas silvestres para la maceración, me dijo como prepararlo y conservarlo todo el año.
Solo espero que este año también te acuerdes de mi y me guardes unas poquitas para el próximo año. Gracias!!!